El manzano japonés, es un árbol catalogado como extraordinario por su gran componente ornamental, que deriva de maravillosas flores que son el elemento más identificativo. El género malus proviene de la abundancia de sus floraciones, lo que sin duda es un hecho remarcable, ya que si algo prolifera en grandes cantidades en este árbol, es precisamente las maravillosas, coloridas y brillantes flores que produce. Este árbol puede alcanzar una altura de 4m, lo que lo hace ideal para pequeños jardines. Sus flores se caracterizan por tener 5 pétalos redondeados que no superan los 5 centímetros de ancho y que forman pequeños racimos de flores muy vistosas que parten de un color colorado para desvanecer en tonos rosados a blanco.
